La mía se la comió el gato, ¿y la tuya?
31/3/07
El Manual
En mi dilatada experiencia, años de observación y ocio en diferentes ambientes, terminé por concluir el tratado de diferenciaciones femeninas que será objeto de la siguiente conferencia.
Las mujeres, tomadas en grupo, claro está -todos sabemos de la complejidad que entraña cada una de ellas y no es caso de extenderme y aburrir "las mujeres son seres extraños y les pasan cosas"- Iñaki dixit- se dividen principalmente en dos categorías: Petardas y Golfas. Nos limitaremos a la descripción de éstas últimas ya que hacerlo con el primer grupo resultaría ofensivo dada la inclinación y los gustos de ésta, su conferenciante. El método científico no debe quedar empañado por emociones y ruidos inútiles.
Echaremos mano de la sabiduría popular y adaptándolo diremos: la golfa nace, no se hace. Cierto es que el entorno contribuye: ciertas amistades no deseables, una educación relajada donde los valores mostrados van desde el libre albedrío a las consignas propias y allá te las apañes que eres una personita válida, y en general una vida que transcurre sin que la femina pueda hacer mucho por evitarlo, pueden influir. Pero que nacer... se nace.
En la adolescencia la golfa se reirá cuando alguien le asegure que "los chicos solo buscan una cosa". Ella sabe que probablemente sea la misma que busca ella: conocer.
Durante la juventud puede formar parte de ciertos círculos antisistema, o cuanto menos feministas, sin que ello haga decaer su curiosidad hacia el género opuesto. Su compasión hacia ellos, como hacia ellas, estará basada en un único pensamiento: "hay que joerse que perdiditos andamos".
Y ya instaladas en una serena, o no, madurez habrán llegado a una suerte de conclusiones que no por ellos serán concluyentes, o menos, pero vaya usted a saber.
Quedan expuestas en los siguientes puntos:
La aspiración de pareja estable es legítima pero las redes construidas a lo largo de su tiempo son imprescindibles: familia, las otras golfas y los amigos del género masculino (el orden transcrito es aleatorio). Entre ellos pueden hallarse antiguos amantes pero no será buena idea practicar el sexo, la golfa sabe que alto precio se paga aunque el sexo le guste, ¡y cómo le gusta!. La amistad con ellos es muy valorada entre las golfas, de hecho es posible que sean elegidos con mayor facilidad que sus amigas mujeres. No existe la categoría Petardo entre ellos y eso las tranquiliza. (Tienen otras pero se enmascaran con mayor dificultad; pero no nos dispersemos)
La golfa se siente identificada con su género. Por eso encuentra innecesario las peleas o las competiciones inútiles con otras mujeres. Es más, buscará su compañía y sólo en el caso de descubrirlas como petardas las ignorará. Desgraciadamente sucede más a menudo de lo que desearían.
La maternidad se contempla en ellas desde todos los ámbitos, el aborto también. Si deciden ser madres, y a pesar de que asegurarán que nada fue más maravilloso en su vida, y nos consta que es cierto, no fingirán y serán conscientes de la castración personal que supone el serlo. La sublimación del útero no es lo suyo. Durante siglos fue necesario por aquello de sobrevivir pero ya. Pensarán que sus hijos son los más especiales pero no por ello dejarán de darse cuenta que de ser así en todas nadie se explica la cantidad de adultos mediocres que existen. - Samantha Morton en Código 46-
Se cuestionarán todo, suelen resultar incómodas al resto, sobre todo en el caso de que se trate de bien pensantes, por mucho que intenten enmascararlo. La premisa es sencilla, se cuestionan sobre todo a sí mismas, sería imbécil no hacerlo hacia los demás. O injusto.
La coquetería supondría un capítulo aparte. Pueden ver el anexo entregado. Una golfa es difícilmente identificable por el sayo.
La golfa se mostrará tal y cual es, sin pudor ante heridas y miedos siempre y cuando el hombre haga lo propio. "Cuestión de reciprocidad, baby"- Techu, dixit- , suele ser su frase recurrente. De no ser así la golfa hará mutis por el foro y poco de ella se llegará a saber.
No son más fuertes que el resto, y se encienden ante una conclusión tan simple, pero le echan redaños porque entienden que en la vida hay que ser consecuente para no liar a nadie. Sangran, incluso cuando no menstruan, lloran y gritan con la misma facilidad. En fin, que atraviesan etapas de niñas asustadas y a la intemperie.
Se interumpe bruscamente, en su cara se dibuja un enorme gesto de cansancio, diríase que milenario, una máscara africana silenciada. Recoge con premura sus papeles y desaparece.
Ya en la calle noto una sensación de inquietud, de término algo inconcluso y un último pensamiento antes de cruzar la calle: lástima, con gusto le hubiera comprado uno de sus manuales.
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22 comentarios:
LO TENGO!
Esta soleada mañana de nubes y claros me ha regalado una grata sorpresa.
Y el título como que me suena, hablábamos de ello hace nada.
“Viajes por el Scriptorium”.
Solo pronunciar las mágicas palabras –hace un par de días lo mencioné- y ya está aquí.
El último Paul Auster.
Señorita está que se sale en la búsqueda y captura de imágenes. Me tocó “La mirada del león”.
Ahora la leo conferenciante.
Ya!”Dudas.
¿Las petardas son golfas tontas?
¿La chica del collar gigante es golfa o petarda?
Y yo que me considero un “ser extraño al que le pasan cosas”
Mi madre tras tener durante cuatro años y medio un hijo único varón quería la parejita, le hacía mucha ilusión tener una niña. Y aparecí yo.
¿será por eso?
¡Oh!...,(y soy perfectamente conciente de que lo escueto del comentario no permite traslucir más que una parte infinitesimal del shock placentero experimentado.¡¡Demonios!!, ¡como me atraen las golfas!, quizás como contrapunto a mi desprecio por las petardas (y petardos, porqué no decirlo). Me ha enamorado querida, que lo sepa, porque no es cuestión de andar con ese "mumbo jumbo de rodeos para sugerir sin arriesgar, y esperar que nos lo den hecho.
Es Ud. brillante querida, y de una honestidad que redime a su género, tan hecho a arrastrar vocaciones comerciales, peristas hábiles que sopesan antes de aguantar un peso; y comercian vilmente con lo único que creen que tienen. ¡Si supieran que abriendo los ojos y el alma podrían parecerse Ud.!....claro que también sería necesario que el petardaje masculino elevara un tanto el deplorable coeficiente general.
Absolutamente genial este manual . Me encantaria porder aplicarmelo de cabo a rabo.
Encantada de pasar por aqui (vengo desde Luzbel )
Besos
Me hiciste recrdar el libro de la psicoanalista Annie Anzieu: "La mujer sin cualidad"... quizá el mejor ensayo que he leído sobre el tema de lo "eterno femenino"...
Ante estos hechos tan importantes, suelo confesarme afásico, calzarme el bombín y silbar alguna wildeana sentencia... con todo respeto y sentido risueño, ¿ah?
¿Verdad que me he pasado varios pueblos corazón?, es que me pongo muy pasional cuando duermo cinco horas seguidas. Verá que mi tono es como reculando, y no es que haya perdido su embrujo, ni pizca de potencia, pero si bien se dice de mí que soy un boludo, lo que en realidad soy es: voluble( ae sta hora ya me he enamorado de otras dos sirenas, con sus cantos que no puedo desoir. Algo os pasa, yo lo sé. Me vais a matar.
Vale, ahora te toca el de los hombres vistos por tí, ese lo quiero para enmarcar, tomate el tiempo que necesites.
Besos.
Xnem... ya lo tengo desde hace dos semanas!! jeje. El de Auster, digo pero aún no he empezado con él.
Lo de las golfas tontas no sé, mira que me da que no, suelen ser tal cual. Entre las que se escandalizan con facilidad suele haber más petardas, las cobardes, las que no son conscientes de sí mismas, las que juegan sin querer jugar... uffff, ya te digo, un Tratado sería necesario!!
La niña del aro será golfa, fijo!! tiene una carita desafiante que... jajaja.
Luzbel, sí, habria que cambiar al mundo, el de ellos y el de ellas... demasiada visión "comercial" como usted bien dice en esto de las relaciones. Ayss de los intercambios convencionales, qué jodidos son pero que cómodos, eso sí!
Lástima, al leerle me sentí Sisí y ya andaba gritando por palacio: Francisco José dónde estás? (por qué usted se llama así, no?). Snif. Le permito que se pase cinco, hasta diez pueblos, el entusiasmo es asín... pero como no soy celosa también me parece bien que ande de sirena en sirena. Siempre hay más de una que merece la pena, hágame caso! besosssss, pulmoncillo.
Churra, pase y sírvase, está usted en su cueva. Ya la leo.
Reaño ya me comentaste de ella, tengo que buscar ese libro!. Besossss con bombín y una pirueta tan risueña...
Torito, no me provoques!!! jajajaja. Sabes lo malvada que podría llegar a ser en ese? jeje. (en realidad no tanto pero a más de uno le saldrían pupas)
uuummmmm ...... conclusión.....si petarda no soy.....entonces guarra.....
nací queriendo.....y moriré sin dejar de hacerlo.
Besos querida me hiciste pasar muy buen rato....
¡Ay, que ganas de decir PLIÑ, un diez!, pero no lo diré, porque veo que ya no es necesario, y además, la M-30 la he descartado de mis itinerarios.
Sé que de tantos porros tengo los pulmones como saquitos de té, pero ¿cómo lo sabía Ud.?, o acaso, lo de "pulmoncillo", tiene un significado que ahora se me escapa. Besos del superhéroe y míos.
Absolutamente genial! Aunque corta me voy a quedar en mi comentario después de todo lo expuesto por el mismísimo Diablo.
La golfa nace, obvio, y la opresión ayuda a su desarrollo.
Mis aplausos, Margot.
Besos.
Fortu, ya decía yo... jeje. Me alegro de que te rieras, de eso se trata, no? vive dios que sí!! Me saluda a la cuidadora de gansos, besoss a las dos!!
Luzbel, sus pulmoncillos seguro estarán bien, de ahí mi saludo dirigido a ellos... besosss rojo libanés (existió de veras? no fue una leyenda urbana?)sin pasar por la M30.
India Ning, ay la opresión, qué mala es pero lo que ayuda la jodía como motor... verdad? jeje
Besossss golfantes pero menos que mañana es lunes...
Debí agregar tras lo de los saquitos de té, que mi cerebro es de dimensiones modestas,...y me pierdo corazón. Por eso no quiero decirle que ha sido su último comentario un tanto críptico, sino que mi capacidad de especulación sobre sus últimas frases, no ha sacado nada en claro. En cualquier caso me gusta leerla; y podría establecer un paralelismo con los Beatles en mi juventud: no entendía lo que decian, pero ¡joder!qué bien sonaba.
Oiga querida, que estoy intentando una quedada de los impresentables, entre los que(lamento informarle) se encuentra Usía (no el gilipollas, sólo quería parecer fino), y como es tradicional me han ignorado. Sé que puede ser un congrreso complejo, y yo me comprometería a albergar a la sacerdotisa y a otra/o que venga de fuera (porque la cumbre sería en Madrid). Ud. que es vecina, y tiene predicamento por los demoledores posts que cuelga, ¿no me echaría un cable?.
Gracias por el poema,
dulce golfa
de mis sueños transilvanos.
Luzbel, ou yeah!! besosss let it be. (Señor mío, el rojo libanés era, según rezaba la leyenda, el mejor hachís de Marruecos... nunca llegué a probarlo, cachis!!)
De nada,
dulce vampira
de mis sueños serranos.
¡Ahora sí que sí!,...en lo que a mí respecta, es una leyenda urbana; verá lo mío es la primavera,...el polen, (menos mal que no soy alérgico)
Golfas y golfos: preciso panorama.
no sé Mragot, como que hay tanta variedad de mujeres...
:) está muy bien escrito todo.
Salute.
Rain, lo sé... como cada mujer pero los juegos de malos y buenos son así... jajaja.
Salute, limeña!
Petardo amante de las golfas, ¿a ver como se congenia eso?. Muy bueno el manual. Además cada día me gustan más, te ahorran mucho que pensar.
"Dicen que fue una costilla
Hubiese dado mi columna vertebral por verlas andar
Despues de hacer el amor hasta el tocador y sin voltear
Sin voltear, sin voltear." Ricardo Arjona.
yo por mi parte, no me ocupo si son golfas o petardas, simplemente no confío en nada que sangre durante una semana y que no muere.
Y las brujas que hacen pócimas y encantamientos en la cocina, ¿dónde quedan? ¿Y las triministras?
jjajajjaja... me has hecho reir, pero sobre todo replantear mi situación. No sé dónde ubicarme.
Besos, querida.
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